Entradas

Mostrando entradas de enero, 2016

Jaime Gil de Biedma, Pandémica y Celeste

Jaime Gil de Biedma, Pandémica y Celeste Imagínate ahora que tú y yo muy tarde ya en la noche hablemos de hombre a hombre, finalmente. Imagínatelo, en una de esas noches memorables de rara comunión, con la botella medio vacía, los ceniceros sucios, y después de agotado el tema de la vida. Que te voy a enseñar un corazón, un corazón infiel, Desnudo de cintura para abajo, Hipócrita lector - mon semblable - mon frère! Porque no es la impaciencia del buscador de orgasmo quien me tira del cuerpo hacia otros cuerpos a ser posible jóvenes: Yo persigo también el dulce amor, el tierno amor para dormir al lado y que alegre mi cama al despertarse, cercano como un pájaro. ¡Si yo no puedo desnudarme nunca, si jamás he podido entrar en unos brazos sin sentir -aunque sea nada más que un momento- igual deslumbramiento que a los veinte años!.    Para saber de amor, para aprenderle, haber estado solo es necesario. Y es necesario en cuatroc